29 de abril de 2013 | By: Leonardo García.

Jamila Medina Ríos

“Puedo lamerte las pupilas
pastar temblando en la largueza de tu superficie
las migajas del vino que se ofrendó a los dioses”


Jamila Medina Ríos
Holguín - Cuba
(1981)



POR SI VAS A DARME DE COMER



Puedo comer de tu mano como un pájaro
inclinarme a beber —como un ciervo— en tus ojos...

Es en este acto de las visitaciones
cuando sacio mi hambre mi sed de clavicordios
—de palabras que son hacia ellas un símbolo
donde tengo que hurgar para encontrarte.

En ese solo de vida en que te espero
—con la lengua tendida hacia el milagro del vino
arqueándose en la hondura de los vasos rebosados
de trigo—
cabe todo el ritual del cachorro amamantado
de la boca entreabierta
que besa en la boca a la boca descorchada
y pacta el salmo de los fieles
que se echan al gaznate
la sangre y el cuerpo del hijo pródigo oloroso a levadura.
Puedo lamerte las pupilas
pastar temblando en la largueza de tu superficie
las migajas del vino que se ofrendó a los dioses

pero témele:
has de saber
que si me das de comer como al cisne como al ciervo
existen trampas agolpadas en los frutos
en los círculos iridiscentes del lago donde bebo
en el ansia con que regurgito una y otra vez el adentro
de tus párpados
para lamerlo despacio con mis mañas
con mis ritos de ave y bestia que puede huir
despavorida si te acercas
pero que deja intacta la planicie de tus aguas
y queda quieta en su fijeza:
haciéndole la venia a tu mano extendida.



Nota:
Vídeo bajado del portal Youtube.com

/ Jamila - Escritora Cubana /
23 de abril de 2013 | By: Leonardo García.

Reinaldo Arenas

“Les dejo pues como legado
todos mis terrores, pero también
la esperanza de que pronto Cuba será libre”.


Carta de despedida


Reinaldo Arenas
(1943 - 1990)
Diciembre 07 de 1990




Queridos amigos:


Debido al estado precario de mi salud y a la terrible depresión sentimental que siento al no poder seguir escribiendo y luchando por la libertad de Cuba, pongo fin a mi vida. En los últimos años, aunque me sentía muy enfermo, he podido terminar mi obra literaria, en la cual he trabajado por casi treinta años. Les dejo pues como legado todos mis terrores, pero también la esperanza de que pronto Cuba será libre. Me siento satisfecho con haber podido contribuir aunque modestamente al triunfo de esa libertad. Pongo fin a mi vida voluntariamente porque no puedo seguir trabajando, Ninguna de las personas que me rodean están comprometidas en esta decisión.

Solo hay un responsable; Fidel Castro. Los sufrimientos del exilio, las penas del destierro, la soledad y las enfermedades que haya podido contraer en el destierro seguramente no las hubiera sufrido de haber vivido libre en mi país.

Al pueblo cubano tanto en el exilio como en la Isla, los exhorto a que sigan luchando por la libertad. Mi mensaje no es un mensaje de derrota, sino de lucha y esperanza.

Cuba será libre. Yo ya lo soy.


Reinaldo Arenas
New York 
22 de abril de 2013 | By: Leonardo García.

Teresita Burgos Benavides

“¿Quién es el hombre que deslumbra la claridad
tras la voz de una campana y devela el estigma
que pudre los pasillos, los aires que transitan?”

Teresita Burgos Benavides



TERESITA BURGOS BENAVIDES


CASA DE SILENCIOS


¿Soy realmente yo quien traspone el umbral
de la PIEDRA intuitiva y recelosa,
la neblina que traspasa
el bronce de las puertas?
¿Soy esa sustancia hundida
en el soplo de una hoja
borrada junto a la FUENTE
por seres ensordecidos y cegados?
¿Seré acaso el AGUA
y no me reconozco?
¿Quién es el hombre
que DESLUMBRA LA CLARIDAD
tras la voz de una campana
y devela el estigma
que pudre los pasillos,
los aires que transitan?
Quizá ni siquiera existamos,
casa de silencios,
padecemos de transparencias
y vastas oscuridades.
A veces la LUZ cree acompañarnos
cuando se filtra en la mañana de los pinos
pero la LUZ tampoco sabe de nosotros
ni de sí misma.

Nadie podrá hallarte en la PIEDRA aparente
nadie me sabrá
parte abisal de tus cimientos.
La ciudad nos olvidará un día
de ruindades y de LLUVIA.
¿Quiénes son los que te confunden
con su SED de hallazgos,
por qué pactas con la LUNA
y los confundes?
Las casas siempre mienten
a los que imponen sus huellas
sin ser amados.

El silencio sólo entiende de encuentros
en lejanías insalvables.
¿Realmente alienta cierta LLAMA
en tu sien transida de noches
existirá una noche diferente
que rija el polvo?
Casa de silencios
no sé si eres tú
quien me ronda sin ser VISTA
cuando la LUNA vieja aparece,
pero creo escucharte susurrar en tu mundo
que me amas.



Teresita Burgos Benavides, (poeta Cubana).
7 de abril de 2013 | By: Leonardo García.

Liudmila Quincoses Clavelo

“Hay un atardecer que no se acaba nunca,
y rostros en la noche que no tienen vida”.


SOMBRA DEL CONDENADO

 Liudmila Quincoses Clavelo
(1975)



SOMBRA DEL CONDENADO


Yo soy quién te habla del otro lado del sendero
altivo caminante no me evites.
No cierres esos OJOS que el miedo ha de anularte
no dejes que se borren las huellas del dolor.
Hay un atardecer que no se acaba nunca,
y rostros en la noche que no tienen vida.
Yo siempre estoy contigo
no es el VIENTO quién mueve las ramas más distantes.
Escúchame, te llamo desde el sitio más solo,
te llamo sin mi voz.
Soy el paso del CIEGO hacia el abismo inmenso,
y el reo que en silencio se fuga hacia la MUERTE.
No creas que te acoso, esto no es agonía.
Agonía es no tenerte dormido ni despierto, si
distante a cada paso.
Haz un alto en tu absurdo camino
y susúrrame algo, una frase, una queja.
Yo soy tu voluntad
sin mí los cerros altos se toman imposibles.

Desde que sé tu nombre lo escribo sobre el AGUA,
porque de AGUA es tu cuerpo
y tus OJOS SON AGUA.

Ese SOL ya me anuncia que no has de regresar.
Noche tras noche te he librado de los grandes señores
que con faz tenebrosa tratan de separarnos.
El UNIVERSO ES SÓLO UN CÍRCULO,
UNA SUTIL SERPIENTE QUE SE MUERDE la cola.
Yo habría querido paz y no la tengo,
yo habría querido descansar y no hay reposo,
yo habría querido ser PIEDRA y soy sólo sombra
como tú has de serlo.
Pero tu belleza es tanta,
es tanta tu tristeza
que no puedo llevarte a lo oscuro conmigo.
En aquellos lugares donde las sombras
son sólo LUZ
siniestras imágenes de lo que fue tu rostro
viven en el AGUA.
El tiempo no existe,
son dos metales el ORO del día y el bronce de la noche;
impresos en una misma moneda
que no para de rodar, no se detiene.
Atraviesa laberintos, paisajes difíciles,
atraviesa mi alma atravesada ya
y no llega nunca.
En los días que aquí suelen llamarse noches
he reconocido tu voz
que en el silencio vibra, me condena.
Dame una mano tuya y líbrame del miedo.
Yo vivo en las sombras llévame a la LUZ,
a la intensa LUZ.
Han venido a buscarte los Siervos del Maldito.
Si en el último momento descubres mi presencia
sé que te habré salvado.


(De Poemas en el último sendero, Cuba)